Está muy bien tener un personaje armero, preferentemente un SW, que siempre le sobran habilidades, porque de esa manera él te engarza "gratis" los objetos de tus otros personajes y ahorras muchiiiiiiiiiisimo oro. Lo único que hay que hacer es dejarle en el apartado "compartido" del Baúl el material, él lo engarza y lo vuelve a poner ahí para que lo coja el otro personaje. Por lo mismo, es interesante tener un personaje Negociador, quizá un Inquisidor, para que compre chucherías, armas y cosas buenas a los otros personajes; así siempre los llevas bien equipados.
Y hay más ventajas. Digamos que tienes un armero nivel 100. Puede engarzar todo lo de nivel 100 para abajo. Digamos que tienes un negociador nivel 100, que puede comprar montones de virguerías a altos niveles.
Te haces un personaje nuevo. Le compras o le das si ya tienes, piezas de armadura con muchos sockets. Que sean de su nivel, bajo.
Ahora, coges el negociador y compras 7-8 anillos buenos como las Lágrimas de Kybele, que a nivel 100 te dan 1000 de vida por anillo. O el amuleto "Gema de la Vida", similar a ese anillo. Son fáciles de encontrar con el negociador, a base de visitar unas cuántas tiendas.
Coges al armero y engarzas esas armaduras de nivel bajo del personaje nuevo, el que sea, poniendo en cada una un anillo y mejoras de defensa.
A través del Compartido, le devuelves ese equipo al nuevo personaje.
Resultado: Tu nuevo personaje empezará el juego con ¡8000 puntos de vida!
y una armadura de treinta pares de h. con lo cual, llegar al nivel 50 será un paseíllo, si además le mejoras el arma. No habrá manera de matarlo ni queriendo.
Son: el equipo perfecto.
Esto es porque incomprensiblemente, un personaje nivel 1 no puede equipar un anillo de nivel 100, pero sí una armadura que tenga engarzada un anillo de nivel 100. Así que la mejor táctica online es hacerse primero un negociador, luego un armero, subirlos bien los dos a la vez, y después el resto de personajes.
¿Cómo lo ves?
En cuanto a lo de engarzar amuletos, creo que es desde el principio, sí.
Saludos.